Esta semana han captado una impresionante imagen de un agujero negro tragándose una estrella.
Entonces me pregunté, cuántas cosas hermosas no vemos y están sucediendo.
Cuántas maravillas existen a nuestro alrededor y ni siquiera las pensamos o disfrutamos.
Privilegios que disfrutamos y muchos otros no tienen. El poder ver una noche estrellada, aunque haya nuevos agujeros negros.
Oler cada olor distinto y que nos traslada a momentos de nuestra vida. Los sabores que nos hacen disfrutar, e incluso hacer viajes gastronómicos...
Cosas sencillas como poder hablar, caminar, sentir...
Pero también, pensaba en cuántas "estrellas" están siendo tragadas por agujeros negros, quizá en estos tiempos el agujero negro es aún más grande, y tiene una fuerza mayor, quizá dan ganas de dejar de luchar y dejarse tragar por el... pensaba en cuantas personas están dejando de brillar y perdiendo la esperanza por el agujero negro que supone esta situación, una situación que pareciera no tiene fin, una situación que nos arrastra al vacío y la oscuridad, al desánimo y desaliento.
Pero creo que para la mayoría de la gente, el mayor agujero negro es la muerte, esa situación que arrastra a alguien amado, o que está a punto de tocar a tu puerta, y te preguntas ¿ habrá algo después de ese terrible y aterrador agujero negro? ¿Habrá luz después de tanta oscuridad?
Un mediodía, hace ya muchos años, la tierra se oscureció, porque la estrella más brillante se dirigió hacia el agujero negro, si, fue El, para vencer la oscuridad desde dentro y dar una solución.
Jesús, estuvo dispuesto a morir y pasar por el trago amargo de la muerte para salvarte.
Mientras estés aquí, no dejes que te atrapen los agujeros negros, aprovecha la vida, ama, lucha, esfuérzate, haz bien a los que te rodean, cuida de los demás, disfruta de las pequeñas cosas.
Pero recuerda que Aquel que resucitó y volvió a brillar quiere guiarte, acompañarte toda la vida y vencer la oscuridad y la muerte por ti.
¿Dejarás que el agujero negro apague tu luz?
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